Organizada bajo el Alto Patrocinio de Su Majestad el Rey Mohammed VI, esta manifestación, que se prolongará hasta el 26 de abril, se inscribe en el marco del programa “Marrakech, Capital de la Cultura en el Mundo Islámico para 2024”, y coincide con la celebración del Mes del Patrimonio en el Mundo Islámico.
La inauguración de este evento, que pone de relieve el patrimonio de la Ciudad Ocre y la singularidad de su cultura, estuvo marcada por una visita al Museo del Patrimonio Inmaterial de la plaza de Jemâa El Fna, que acogió la primera conferencia científica a la que asistieron representantes de la ISESCO, el presidente de la Fundación Nacional de Museos (FNM), Mehdi Qotbi, así como personalidades del mundo del arte, la literatura, la política y los medios de comunicación.
Al comienzo de la visita a esta meca cultural con vistas a la legendaria plaza Jamaa El Fna, Qotbi expresó su satisfacción por el lanzamiento de esta iniciativa cultural del Museo del Patrimonio Inmaterial de la plaza Jamaa El Fna, situado en el corazón de esta plaza histórica donde los colores y los olores se mezclan armoniosamente con las luces y los sonidos en una hábil combinación.
En declaraciones a la MAP, el presidente de la FNM añadió que la cultura es un componente esencial capaz de tender puentes de comunicación entre los pueblos para un mayor entendimiento mutuo.
Por su parte, el director general de la ISESCO, Salem Bin Mohammed Al Malik, en una alocución leída en su nombre por el Jefe del Departamento de Cultura y Comunicación de dicha organización, Mohamed Zine El Abidine, señaló que la ISESCO presta especial atención a la ciudad de Marrakech, señalando que la designación de Marrakech como capital de la cultura del mundo islámico se explica por su influencia mundial y el deseo de dar a conocer su singularidad cultural, sus aspectos artísticos y su atractivo turístico, que la han convertido en un destino internacional.
Marrakech figura en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO desde 1985, gracias sobre todo al carácter único de su antigua medina, añadió.
